Ugt decidió expedientar a 5 de sus 6 delegados sindicales en Eulen Seguridad Navarra, por compartir la presidencia del comité con CCOO alegando que en sus estatutos eso no estaba permitido. Igualmente, se les acusaba de “expresar opiniones en términos despectivos y desleales” y de hacer un “uso irregular” de las horas sindicales.
Por su parte, los expedientados dicen que fue por su oposición a la manera de actuar de FES (federación de servicios) en Navarra y sobre todo en el sector de la seguridad privada y, más en concreto, en su empresa, donde se saltaban al comité para negociar directamente con la empresa.
Hay que recordar que, en un principio, el comité de Eulen seguridad tenia siete componentes de UGT y 2 de CCOO, pero uno de los miembros de UGT (presidente del comité en ese momento) se dio de baja por diferencias con el Secretario General de la FES de UGT, Luis Hernádez Inac.
Los hechos suceden meses después de que los delegados de Eulen discreparan abiertamente con Luis Hernández en una reunión sobre la forma de elegir a los delegados que asistieran al Congreso que supuso, después, la reelección del propio Luis Fernández Inac al frente de la FES.
Breve descripción temporal de los hechos
En abril de 2008 los delegados del Comité de Eulen Seguridad Navarra de CCOO y UGT acuerdan compartir la presidencia entre 2007 y 2011, y comunican el cambio de presidente a la FES el 20 de agosto de 2009. Sin embargo, aunque se encontraban informados tanto del acuerdo, como del cambio de presidente del comité, no es hasta octubre de 2009 cuando se inicia el expediente, tras las discrepancias sobre la forma de elección de los asistentes al congreso.
El 27 de enero de 2010 es admitida a trámite la denuncia interpuesta por Ana Fernández, como Secretaria de Organización de la Federación de Servicios (FES) de UGT en Navarra, contra cinco de sus seis delegados sindicales en la empresa de seguridad Eulen.
El 22 de febrero no comparecen al acto de conciliación, en Madrid, ni el conciliador (quien fijó la fecha y citó a las partes) ni la denunciante. A pesar de la no comparecencia de las partes y, por lo tanto, de su no celebración, el acta del acto de conciliación consta como ‘sin acuerdo’.
Con fecha 3 de marzo por parte de la Comisión se solicitan alegaciones, que son entregadas días después por ambas partes, pero ya sin ninguna esperanza por parte de los expedientados.
El 21 de abril se celebra acto de vista en Madrid en locales de UGT y se presenta Ana Fernández con dos testigos y uno de los expedientados. De dicha vista hay un acta y una grabación.
Ya en mayo, a solicitud nuevamente de la Comisión Federal de Garantías, ésta recibe nuevas alegaciones por parte de Ana Fernández, del expedientado que acudió a la vista y, conjuntamente, de otros dos de los expedientados, comunicando éstos que no desean pertenecer a UGT ni a nada que tenga que ver con dichas siglas, ya que consideran todo esto un ‘paripé’ para quedar bien UGT cara a la galería.
A finales de junio los cinco expedientados reciben la resolución de la Comisión Federal de Garantías de UGT, que es la siguiente: "Exclusión de la vida orgánica del sindicato y separación de cargos electos y/o de representación o inhabilitación de ocupar los mismos por un periodo de ocho años a partir de la presente resolución, que se remite a las partes con esta fecha, y a la Comisión Ejecutiva Federal para su cumplimiento".
La resolución no dice nada del cese de afiliación o expulsión de UGT, y, además, se da la circunstancia de que les siguen pasando la cuota religiosamente. De hecho, en una carta dirigida a los afiliados, se afirma: “Queremos dejar claro que estos compañeros no han sido expulsados del Sindicato, sino inhabilitados para representar al mismo y para formar parte de los cargos de su estructura interna”.
En esa misma carta, enviada a todos los afiliados de Eulen Seguridad en Navarra, también se comunica la creación de la sección sindical de UGT en dicha empresa. En consecuencia, han creado la sección saltándose sus normas internas, ya que no han avisado a todos los afiliados para la creación de dicha sección sindical, pues los cinco expedientados no han recibido ninguna comunicación.
Según uno de los trabajadores expedientados, para tomar la resolución, además de los dos "testigos" aportados por Ana Fernández, “(…) las pruebas son un acta de una reunión en la que nadie por nuestra parte firmó ni había espacio para ello, y la otra, repito, un acta del Comité de Eulen no firmada por absolutamente nadie”.
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