La Unidad de Delitos Tecnológicos del Cuerpo Nacional de Policía detuvo en Tenerife y otras partes de España a quince personas, entre las que figura el autor de las titulaciones falsas de Bachiller o Formación Profesional, de 43 años, que regentaba una academia para preparar a trabajadores de seguridad privada.
Miembros del Cuerpo Nacional de Policía desmantelaron una trama dedicada a la falsificación de títulos de Bachiller y Formación Profesional en Tenerife.
La investigación partió de la Unidad de Delitos Económicos y Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la capital tinerfeña y comenzó el pasado mes de mayo.
Como resultado de las pesquisas, los agentes capturaron a 15 personas en total, a la vez que lograron identificar al individuo que elaboraba y vendía los documentos falsos.
Otras personas fueron arrestadas por adquirir los citados "títulos" y utilizarlos para acceder a importantes puestos de trabajo e, incluso, para presentarse a oposiciones de empleo público.
La mayoría de los detenidos pertenecen a la actividad de la seguridad privada y residen en Tenerife. No obstante, los funcionarios también descubrieron a personas relacionadas con la sanidad o la náutica.
El entramado delictivo estaba compuesto por un individuo que facilitaba el papel de Estado falso, es decir, el soporte con los modelos de título para Bachiller, FP1 y FP2.
Otro de los implicados elaboraba las titulaciones, para lo que utilizaba programas informáticos, escáner y sellos de caucho que imitan la firma de la titular del Ministerio de Educación.
El resto de los acusados son, fundamentalmente, vigilantes, que necesitaban un título de Bachillerato para acceder a puestos como director o jefe de Seguridad en empresas del subsector.
Los títulos eran elaborados por J.M.F.H., de 43 años. En el momento de su arresto, a dicha persona se le incautó diverso material, como papel de título en blanco, sellos de caucho y numerosas plantillas informatizadas de títulos que ya habían sido impresos y vendidos.
La facilidad para encontrar compradores radicaba en que esta persona regentaba una academia para vigilantes de seguridad y, además, estaba muy relacionada en dicho "mundillo".
Además, llegaba a utilizar tales falsificaciones como regalos en sus relaciones familiares y sentimentales.
Los títulos se podían conseguir previo pago en efectivo de cantidades que oscilaban entre los 800 y los 1.500 euros. A juicio de los investigadores, se trataba de un "módico precio" que eximía a los compradores de estudiar y superar los correspondientes exámenes oficiales. Los trabajos estaban tan bien conseguidos que llegaron a pasar el filtro de diversos organismos públicos.
Todos los implicados se hallan en libertad con cargos a la espera de la finalización de la instrucción del caso. Los responsables de la investigación no descartan que haya más detenciones.
La investigación partió de la Unidad de Delitos Económicos y Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la capital tinerfeña y comenzó el pasado mes de mayo.
Como resultado de las pesquisas, los agentes capturaron a 15 personas en total, a la vez que lograron identificar al individuo que elaboraba y vendía los documentos falsos.
Otras personas fueron arrestadas por adquirir los citados "títulos" y utilizarlos para acceder a importantes puestos de trabajo e, incluso, para presentarse a oposiciones de empleo público.
La mayoría de los detenidos pertenecen a la actividad de la seguridad privada y residen en Tenerife. No obstante, los funcionarios también descubrieron a personas relacionadas con la sanidad o la náutica.
El entramado delictivo estaba compuesto por un individuo que facilitaba el papel de Estado falso, es decir, el soporte con los modelos de título para Bachiller, FP1 y FP2.
Otro de los implicados elaboraba las titulaciones, para lo que utilizaba programas informáticos, escáner y sellos de caucho que imitan la firma de la titular del Ministerio de Educación.
El resto de los acusados son, fundamentalmente, vigilantes, que necesitaban un título de Bachillerato para acceder a puestos como director o jefe de Seguridad en empresas del subsector.
Los títulos eran elaborados por J.M.F.H., de 43 años. En el momento de su arresto, a dicha persona se le incautó diverso material, como papel de título en blanco, sellos de caucho y numerosas plantillas informatizadas de títulos que ya habían sido impresos y vendidos.
La facilidad para encontrar compradores radicaba en que esta persona regentaba una academia para vigilantes de seguridad y, además, estaba muy relacionada en dicho "mundillo".
Además, llegaba a utilizar tales falsificaciones como regalos en sus relaciones familiares y sentimentales.
Los títulos se podían conseguir previo pago en efectivo de cantidades que oscilaban entre los 800 y los 1.500 euros. A juicio de los investigadores, se trataba de un "módico precio" que eximía a los compradores de estudiar y superar los correspondientes exámenes oficiales. Los trabajos estaban tan bien conseguidos que llegaron a pasar el filtro de diversos organismos públicos.
Todos los implicados se hallan en libertad con cargos a la espera de la finalización de la instrucción del caso. Los responsables de la investigación no descartan que haya más detenciones.
5 Comentarios:
Hola, soy Marisilla de Reciclí & Reciclán y cuatro patitas buscan casa. Muchas gracias por tu voto. Me ha gustado mucho tu blog.
¡¡Manda narices!! yo tanto estudiar pá esto!! jejeje
Saludos
perdón, llegué por accidente, estaba hablando con mi amiga cuando un mosquito se ha detenido en la pantalla de mi teléfono móvil, echaré un vistazo a tu blog, [el mosquito ha muerto, lo he chafao]
Hola Marisilla! bienvenida!!!!
Un saludo!
Que tal Jesus!? jajajaja pobre mosquito ;) bienvenido :D
Había oído de falsificar títulos universitarios, de masters y cosas así, pero de vigilantes de seguridad O.O
Pues ya ves, ni los vigilantes se salvan...
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